En la vida existen dos formas de vivir, siendo feliz o infeliz.
Las personas buscan formas, tácticas y maneras para ser felices y no saben que felicidad es solo escoger la forma de vivir: ¡siendo feliz!
A veces usted percibe que algunas personas se ríen con facilidad de cualquier cosa, otras se quedan tranquilas en situaciones extremas. Éstas son las felices. Algunos de los puntos forma de la felicidad son:
Humildad – No despreciar a nadie y aceptar a las personas de la forma que son, con sus defectos y virtudes y también a los menos favorecidos.
Solidaridad – Buscar ser útil, saber dividir, aún cuando lo suyo sea poco, apoyar y dar esperanza a quien lo necesite.
Compasión – Compadecerse de la tristeza y del dolor del otro como si fuesen suyos, tener comprensión con relación a los errores de los otros sin juzgar u oprimir.
Gratitud – Agradecer a Dios y a todos por todo y por todos, la dádiva de vivir, ver y sentir lo que el mundo nos tiene para ofrecer.
Los infelices, al contrario, cuando tienen algún motivo para reírse no lo hacen en el momento adecuado.
Algunas personas se refieren a la vida como una constante lucha, olvidándose que solo lucha quien va a la guerra. La explicación del infeliz para su infelicidad es que Dios lo quiso así y por eso ellos tienen que cargar su cruz, al final cada uno sigue su destino.
Y la infelicidad también es facilitada por:
Arrogancia – Estar arriba de todo y de todos.
Egoísmo – Pensar, querer y tener para usted siempre el máximo.
Desprecio -Tratar con indiferencia cualquier problema o necesidad del otro.
Ingratitud – No valorar lo que se tiene de bueno, no ver lo que tiene de bello y no contentarse con lo que puede tener.
Como ven, ser feliz o infeliz depende de cada uno y de la forma que se escoge vivir. Ser feliz o infeliz es mucho contagioso, la alegría y la tristeza se transforman en sonrisa y salud o malhumor y enfermedad. Como separar los dos no es difícil, opté de lo que para mí es más fácil, ser feliz y hacer feliz. ¿Y usted, qué escogió?
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