Mucha luz es como mucha sombra: no deja ver.
Mire cada camino con mucho cuidado y atención. Inténtelo cuantas veces juzgue necesario. Entonces, hágase a usted mismo una pregunta:
¿Posee este camino un corazón? En caso afirmativo, el camino es bueno. En caso contrario, él no tiene ninguna importancia.
La llave para todos esos misterios de impecabilidad es el sentido de no tener tiempo. Como regla, cuando usted actúa como un ser inmortal que tiene todo el tiempo del mundo, usted no es impecable. Usted debería darse vuelta, mirar alrededor y ahí comprender que su impresión de tener tiempo es una idiotez. No hay sobrevivientes en ese mundo. Usted debe actuar sin creer, sin esperar recompensas, actuar sólo por actuar.
El poder está en el tipo de conocimiento que se tiene. ¿De qué sirve saber cosas inútiles? Ellas no van a prepararnos para el encuentro inevitable con lo desconocido.
Nosotros no nos damos cuenta de que podemos cortar cualquier cosa de nuestras vidas, a cualquier momento, en un abrir y cerrar de ojos.
Hay muchas cosas que un guerrero puede hacer, en determinado momento, que no podría haber hecho años antes. Esas cosas no mudaron; lo que mudó fue la idea del guerrero sobre sí mismo.
El camino del guerrero ofrece al hombre una vida nueva, y esa vida tiene que ser completamente nueva. Él no puede traer a esa nueva vida sus viejos y horribles hábitos.
Todas las facultades, posibilidades y realizaciones del chamanismo, desde las más simples a las más espantosas, están en el propio cuerpo humano.
No hay realidad sin tristeza y añoranza, pues sin ellas no hay sobriedad ni bondad. La sabiduría sin bondad y el conocimiento sin sobriedad son inútiles.
No desprecie el misterio del hombre en usted, sintiendo pena de sí mismo o intentando racionalizarlo. Desprecie la estupidez del hombre en usted, comprendiéndola. Pero no se disculpe por ninguno de los dos, ambos son necesarios.
Las posibilidades del hombre son tan vastas y misteriosas que los guerreros, en vez de pensar en ellas, eligen explorarlas, sin esperanzas de llegar a entenderlas jamás.